N ° 39
Buenos Aires, octubre 15 de 1999.-
En Uruguay habrá elecciones presidenciales este mes de octubre. Pero los políticos orientales en materia de política internacional tienen una madurez envidiable. No hacen partidismo, ni lo usan con bajezas electoralistas.
En forma unánime los legisladores de los tres partidos principales, Colorado, Blanco y Frente Amplio, votaron una denuncia contra el actual gobierno del Paraguay por violaciones a los derechos humanos y por estar gobernado por una dictadura.
Un diputado uruguayo, Edison Sedarri expresó al explicar la resolución parlamentaria que: “Paraguay está al borde de la dictadura, que tiene a unos enmascarados de demócratas en el Gobierno. Desconocen los derechos humanos fundamentales, la justicia está subordinada al poder político, los que están en el gobierno quieren tomarse una revancha contra sus enemigos políticos. El Poder Ejecutivo no está legítimamente constítuido”
Aquí el odio por Menem, la bajeza política hace que periodistas progres y muchos políticos prefieran la dictadura paraguaya solo porque Menem hay dado asilo político a Lino Oviedo. Pero aquí en frente, cruzando el Río de la Plata el Congreso Uruguayo ha preferido decir la verdad y respaldar al Presidente antes que aceptar los agravios de la dictadura paraguaya.