N ° 38
Buenos Aires, octubre 10 de 1999.-
Muy pequeño en algún diario se publico que para evitar discriminación entre hombres y mujeres las autoridades de la Maratón porteña dispusieron un premio de U$ 5.000- para el ganador de cada sexo. Mientras tanto para el ganador de los discapacitados el premio fueron solo $ 300-
No hay error, no falta ningún cero, para el ganador de la categoría discapacitados el premio fue de solo trescientos pesos. No hay mucho para decir, ni seguramente para que el Jefe de Gobierno o los presidentes de las empresas que sponsorizaron el evento se hagan cargo personalmente.
Hace pocos meses fueron las Olimpíadas para discapacitados. En ellas los deportistas argentinos que intervinieron ganaron varias medallas de oro y plata. Fueron un equipo elogiado por todos sus competidores. En ese momento a nadie se le ocurrió elogiar a Hugo Porta (Secretario de Deportes de la Nación), ni al Presidente Carlos Menem, por el apoyo a los deportistas discapacitados.
La diferencia de monto en el premio es la muestra de cómo en nuestro país los políticos y periodistas se llenan la boca con discursos contra la discriminación, pero después la practican y la tapan. En este caso al artículo 42 de la Constitución porteña omitieron darle cumplimiento.