Artículo

  Volver atrás

N ° 29

Buenos Aires, agosto 06 de 1999.-

TOLERANCIA CERO

      Tolerancia Cero es el lema de muchos políticos para terminar con la inseguridad. Es el remedio, la metodología aplicada por numerosos alcaldes y gobernadores de los EE.UU. Hay que destacar que la Tolerancia Cero se sustenta en algunas políticas claras.

Tolerancia cero para todos los delincuentes, aún cuando vistan uniforme, pero no la presunción que ser policía es sinónimo de corrupto y delincuente. Las presunciones en un hecho de violencia están a favor del agente de la ley, no del delincuente. Los policías están bien pagos.

Las actividades en las calles, o fuera de ellas que alientan formas de delincuencia se han tipificado como delitos. La violación de la propiedad privada se castiga. Para ‘manifestar’ no se permite violar derechos de tránsito, ni de propiedad.

      También se ha dotado a las fuerzas policiales de pistolas calibre 40. En Argentina los calibres superiores a 9 mm son considerados ofensivos por los jueces. Mientras tanto los delincuentes usan fusiles de asalto, bazookas, etc. Así nuestros policías están indefensos. No se trata solo de entrenamiento sino de mejorar su armamento.

      En Dallas también se impuso el toque de queda para menores. De lunes a jueves los menores de 18 años no pueden estar sin sus padres o un pariente responsable y mayor de edad luego de las 22 hs, y de viernes a domingo luego de las 24 hs.

      En Charleston, Virginia, se prohibe a niños en edad escolar estar en las calles en horario escolar, sin compañía de un mayor responsable (padres, parientes, etc.). Se sanciona con gravedad la pintura de graffyties, porque generaban rivalidades en ocupar paredes que terminaban en riñas.

      Pero la Tolerancia Cero además de firmeza policial, solo ha resultado exitosa cuando ha existido un marco legal adecuado, un marco en el cual policías y jueces puedan sancionar a los delincuentes. En otras palabras sin respaldo político no hay posibilidad de aplicar Tolerancia Cero. Por lo tanto sin políticos dispuestos a dejar la demagogia izquierdista y garantista y afrontarlos la Tolerancia Cero seguirá siendo una utopía.

 

  Volver atrás