N ° 12
Buenos Aires, abril 09 de 1999.-
Los otros días en el programa de cable de Armando Ribas y Malu Kikuchi el ex-secretario de Hacienda, CR. Ricardo Gutiérrez, explicaba que en 1989 el poder de contratación estatal era de 17.000 millones de dólares por año. Hoy, en 1999, es de 3.000 millones de dólares por año.
Es decir que a finales del gobierno del radicalismo el monto de contratos que se firmaban en el estado cada año era un 400% más que hoy.
Si además recordamos que existía un velo inflacionario podemos concluir que corrupción existe, pero aún cuando fuera de una proporción tan alta como se pretende sería mucho menor que antes de las reformas económicas del Presidente Carlos Menem.
El 10% de los contratos estatales anuales en 1989 era más del 50% del total de los contratos actuales. ¿Puede ser que haya hoy más corrupción que antes?
Es solo un cálculo para ver el tema en términos reales. La corrupción existe, subsiste. Pero estructuralmente es mucho menor por privatizaciones y desregulaciones. No debemos bajar los brazos, pero tampoco tragarnos que estemos peor que antes.
La realidad es que ahora como hay estabilidad monetaria y medios de prensa independientes, privados y no dependientes de la publicidad del estado, además nos enteramos. Estamos bastante mejor, solo que hacer memoria y analizar es más difícil que sumarse al coro de políticos fracasados y periodistas progresistas (de izquierda ¿vio?).