Artículo

  Volver atrás

N ° 06/2001

Buenos Aires, febrero 12 de 2001.-

SU “CAUSA”

por José Benegas

El ajedrez del intercambio verbal con Cuba se salió finalmente de madre. Mientras el dictador tenía una brillante oportunidad para potenciar a sus acólitos dentro del gobierno de la Alianza, que no son pocos, para conseguir que la Argentina no vote en favor de los cubanos (es decir en contra de los crímenes que contra ellos comete su gobierno), complicó severamente esa estrategia mandando a su embajador a agredir ahora mucho mas abiertamente al país.

No es esta la conducta propia de un gobernante que lleva cuarenta años ejerciendo un poder absoluto y por tanto altamente experimentado, sino la simple reacción ofuscada de un viejo dictador que no soporta ser contradicho. Así y todo, jamás tuvo esos desplantes contra el gobierno de Menem que condenaba indefectiblemente las violaciones a los derechos humanos de los cubanos por parte del dictador. Seguramente no lo consideraba a Menem como un "propio" como para llamarlo "traidor".

    Su representante se dio el lujo de criticar a la desocupación en la Argentina, mientras Cuba practica la esclavitud en pleno siglo XXI a través de su Estado, tanto para sus delirantes proyectos revolucionarios agrícolas como para emprendimientos "turísticos".

    Así y todo, para el Ministro del Interior Federico Storani, conocido simpatizante de esa dictadura, lo lamentable de las declaraciones de Castro es el "flaco favor" que le hace a "la causa". Debería explicitar el funcionario cual es "la causa" que él no quiere ver fracasar.

     José Benegas

 

 

  Volver atrás