N ° 17/2005 - Año 6º
Buenos Aires, diciembre 22 de 2005.-
Mientras la izquierda sigue con sus juicios de persecución a los militares y políticos que defendieron a nuestras naciones de la agresión comunista de los años 60 a los 80, también se empeña en reescribir la historia pero a veces en esos esfuerzos quedan expuestas las confesiones de su agresión armada terrorista y totalitaria.
Hace pocos días por ejemplo se anunció que en un cementerio de Salta se encontraron los restos del “segundo” del genocida Che Guevara. Resulto muerto en 1964 cuando intentaban crear una fuerza terrorista contra la democracia argentina. Recordemos que en 1964 no gobernaban militares sino el presidente Illia elegido con más votos que el mismo Kirchner.
El nombre del terrorista es Hermes Peña Torres, capitán del Ejército Cubano muerto en combate con la Gendarmería Nacional el 18 de abril de 1964.