N ° 10/2005 - Año 6º
Buenos Aires, julio 15 de 2005.-
Una vez más nos llenan de lecturas descalificando la candidatura a diputada nacional de Moria Casan porque es actriz y no está preparada. Algo que justamente argumento nada menos que el Komisario de Relaciones Exteriores Rafael Bielsa en un debate con López Murphy.
¿O es que Bielsa por ser una alfombra K tiene derecho a ser ministro para aprender como reconoció en un debate con Ricardo López Murphy y Moria no lo tendría para ser diputada?
¿Necesitamos diputados que sepan tanto? Hasta ahora la Argentina ha sido gobernada en su gran mayoría por políticos profesionales y de ellos su mayoría son abogados, ¿el resultado es bueno, estamos mejor, hay mas seguridad, más riqueza –o menos pobreza-, llegan inmigrantes o emigran nuestros amigos, hijos, etc.?
Más grave aun es pensar que Moria, o cualquier otra persona necesita una preparación especial para ser diputado nacional, que es ser representante del pueblo, no ministro como Bielsa.
El verdadero ataque a la candidatura de Moria Casan es la intolerancia de aceptar que existan personas derechistas, capitalistas que defiendan sus ideas, de otra forma esos mismos que se rasgan las vestiduras deberían haber reclamado sin descanso la renuncia de Rafael Bielsa luego del mencionado debate con López Murphy, o estar escandalizados por la sacada de máscara de Morgado que se paso durante años haciendo campaña disfrazado de presentador cómico en la TV.
Atacan a Moria Casan los mismos que estaban embobados con Solita Silveyra, Luis Brandoni, y ahora con Claudio Morgado. ¿Cuál es la diferencia para que unos actores sean tratados bien y Moria Casan descalificada? Que aquellos tres se dicen progres, de izquierda, y Moria Casan tiene los cojones de decirse liberal. Algo que le falta a personas que se suponen más calificadas como Macri y López Murphy por ejemplo.
Y más aún atacar a Moria Casan denota un enorme prejuicio, pero también bastante estupidez. Porque si algo está claro es que Moria Casan es una trabajadora, creadora de su éxito, que todo lo que tiene y es se lo gano con su esfuerzo y eso la hace mucho mejor que una enorme cantidad de funcionarios y políticos.
Moria Casan es en muchos sentidos un mucho mejor ejemplo de vida que muchos de esos políticos y periodistas que hoy la atacan. Ella no tienen nada que no se haya ganado, nada que no le haya dado el público que lo pago en forma libre porque siente que ella le da algo valioso.
¿Cuántos políticos pueden decir lo mismo?
¿Porqué necesitan tantas amenazas legales para cobrar impuestos si son tan buenos?
¿Quién endeudo y endeuda al estado, quien sube los impuestos, quienes defaultearon?
Estos mismos políticos que defaultearon los bonos de las AFJP e hicieron humo la diferencia quieren fueros para lamermocasines. Moria no se sabe que haya dejado de pagar sus cuentas.
Luis D’elía es un expoliador profesional, que cada día está más rico (y como la hace en negro ni paga impuestos), porque de piketero la casa y el auto que exhibió en Noticias hace un tiempo no se explica. D’elía es un impune asaltante de comisarías que apoya la lista de la zarina Kristina.
Y Kristina con su carísimo vestuario y cirugías que hemos pagado los demás argentinos, que viaja a Los Ángeles llevándose hasta una mucama y otros 12 acompañantes en primera clase, o usa el avión presidencial para mandar buscar diarios cuando esta el fin de semana en Calafate no le llega ni a la sombra de los tobillos a Moria Casan que todo cuanto tiene se lo gano trabajando.
Moria Casan tampoco anda por ahí hablando de los pobres para ganarse un voto, no promete resolver esa pobreza lo que expone una claridad moral importante, y abismal si la comparamos con los desparecidos fondos de Santa Cruz que Kristina y Néstor aún resisten explicar, con la miseria que ellos promueven como forma de consolidar su poder personal.
Rafael Bielsa ha sido siempre un burócrata y empleado público, admirador del dictador Fidel Castro a quien le recita sus pésimas poesías (un insignificante castigo para el genocida por sus crímenes, pero castigo al fin), que ya siendo ministro se permitió afirmar que no le consta que se violen los derechos humanos en Cuba. Bielsa además de un eterno empleado público es un hipócrita como demostró con esa afirmación, y como diputado será otra mano alzada para ratificar el autoritarismo de Kirchner. No va a ser nunca un representante del pueblo, que se ocupe de controlar al Poder Ejecutivo y cuidar nuestros derechos.
Bielsa es candidato a diputado solo para aumentar la “gobernabilidad” –léase el autoritarismo de Kirchner-.
Bielsa como ministro es cómplice de la firma de 140 decretos de necesidad y urgencia de los cuales no hay uno que haya tenido urgencia, ni necesidad, y eso con un Kongreso que en su obsecuencia y obediencia a Kirchner da vergüenza porque le ha votado todo lo que le vino en gana y no ha tratado ni uno de los 140 decretos mencionados.
Moria Casan en cualquier caso sería una diputada del pueblo, para el pueblo y por el pueblo, lo que además la hace infinitamente mejor que Bielsa.
No tengo dudas que entre Moria Casan y Rafael Bielsa me quedo con Moria, y eso por fundamentos morales muy profundos, como por una mejor institucionalidad. Porque nunca los liberales hemos querido y propuesto que los diputados fueran los sátrapas del zar. Queríamos y queremos diputados del pueblo de la Nación que sepan defendernos del atropello estatal, de los abusos del Presidente.
Si hasta ahora te has tomado la candidatura de Moria en chiste te has tragado cuanto te quieren hacer pensar sobre su candidatura es hora que la vuelvas a pensar. Nada te garantiza que Moria sea buena diputada, pero ciertamente merece tanto o más respeto que quienes solo van a levantar la mano para entregar nuestra libertad y propiedad a Kirchner. Seguramente Moria es mucho mejor que un lamemocasines (de Kirchner) y lamebotas (de Fidel) como ha mostrado ser Bielsa por ejemplo.