N ° 06/2005 - Año 6º
Buenos Aires, mayo 06 de 2005.-
Aunque no lo digan así está claro que Tony Blair esta en la larga lista de personas que son odiadas por Kirchner y su régimen. Es que Blair y el laborismo no son han mantenido la alianza tradicional de Gran Bretaña con los EE.UU. (esa que no cambia porque el presidente sea republicano o demócrata, Clinton o George W. Bush) sino que se han convertido en “neoliberales” consagrados
Blair y su gobierno son también y en especial una lección para los cobardes dirigentes derechistas de argentina que temen reconocerse como liberales, capitalistas o simplemente derechistas.
Y son una lección para los dirigentes del sindicalismo argentino, acerca de cómo se produce riqueza y empleo, de cómo se progresa. Allá el partido Laborista cuya base electoral es el sindicalismo promueve la flexibilidad laboral como forma de promover el empleo y mejores empleos, mientras acá Moyano compite con los milicianos K, los piqueteros.
Como muestra de ello vayan las palabras del ministro de economía británico, el también “diputados de los comunes”, el laborista Gordon Brown que hoy se publicaron en Ámbito Financiero. “Con los laboristas la estabilidad será lo primordial. Basándonos en esa estabilidad seguiremos fomentando un Reino Unido propicio para los negocios, para lo cual eliminaremos barreras, incentivaremos la inversión empresarial, promoveremos el libre comercio y una mayor flexibilidad laboral, y abriremos la competencia en todos los sectores clave de nuestra economía. E invertiremos para convertir al Reino Unido en uno de los líderes mundiales en el campo de la ciencia. La flexibilidad de una economía liberal y dinámica basada en la competencia traerá consigo la equidad y las oportunidades para todos.”
Acá el izquierdismo de los Alfonsín y los Kirchner, los Moreau y esa runfla de progres de los medios aun admira a Fidel Castro y Hugo Chávez. Aspiran a sumarse a su modelo de dictadura y empobrecimiento.
Y la derecha ni siquiera se anima a defender al liberalismo, a la economía de mercado, a la competencia, solo huecas palabras referidas a una gestión eficiente del estado y al déficit fiscal. Es la cobardía de la derecha argentina para abrazar el modelo capitalista y liberal lo que la tiene de perrito faldero de la dictadura de Kirchner y el clientelismo político. Es su no poder defender valores y los beneficios del modelo capitalista y liberal lo que los aleja de la gente. Es su mimetización con el régimen al cual parecen querer reemplazar solo con gente más eficiente en su gestión lo que no motiva a votarlos, ni a trabajar por su triunfo.
A esta altura preferiría una derecha que fuera aunque sea como el laborismo británico. Que por algo hace crecer y mejorar a su pueblo, y triunfa en las elecciones.