N ° 05/2001
Buenos Aires, febrero 05 de 2001.-
¿La Justicia tiene que ser independiente sólo cuando Gobierna Menem?. La independencia del Ministerio Público fue votada por unanimidad en la última reforma constitucional, pero el Gobierno se da el lujo de ejercer una infernal presión tanto sobre los fiscales que apelaron la falta de mérito de los senadores por el consabido escándalo que desató Morales Solá, como a la Cámara que deberá resolver esa apelación. Y la prensa en general, siempre benévola con el oficialismo, solo comenta el dictamen desde una total ignorancia jurídica, haciéndose difícil que esta carta se publique.
Además de miedo, la actitud del Gobierno revela desprecio absoluto por las instituciones que tantos desvelos parecían causarle al elenco mandamás cuando estaba en la oposición. La independencia del Ministerio Público, ahora avasallada, tenía sentido justamente en casos como este; pero claro las leyes duras se aplican a un sector de la sociedad y no a otro y los límites al poder sólo son válidos para determinadas tendencias políticas. Por algo los argentinos hablamos siempre de "este país", porque parece ser siempre el de otros.
José Benegas
abogado