N ° 17/2004 - Año 5º
Buenos Aires, noviembre 11 de 2004.-
La ya muy comentada cuestión de los súper poderes para el Presidente Kirchner y su jefe de Gabinete ha sido un acto de traición a la Constitución, al pueblo argentino y a las provincias que componen el estado federal. Un acto nulo y contrario a la Constitución conforme ella misma dispone en su artículo 29. El cual expresamente dispone “el Congreso no puede conceder al Ejecutivo Nacional facultades extraordinarias, ni la suma de l poder público………. Actos de esta naturaleza llevan consigo la nulidad insanable, y sujetarán a los que los formulen, consientan o firmen a la responsabilidad y pena de los infames traidores a la Patria”
Esta claro que la ley de presupuesto votada por el Kongreso es nula y de nulidad insanable, esta claro que muchos la han votado porque son antirrepublicanos y para ellos la Constitución es una molestia, las elecciones son un medio para la toma del poder como bien podrían serlo las armas, son los setentistas convencidos, los discípulos del peor genocida de la historia americana, Fidel Castro.
Está claro que muchos otros han votado traicionando su juramento y por cobardía política, no importa como la disfracen, ni todo ese palabrerío de “no poner palos en la rueda al presidente, darle las herramientas para gobernar en la emergencia”. La verdad votan por cobardía, porque temen no volver a estar en una lista, y saben que el diktador Kirchner presionará a los gobernadores negándoles el dinero que les corresponde por derecho.
Lo que deberían hacer no es ceder a la extorsión sino denunciarla y enfrentarla. No solo porque es para eso que están cobrando sus sueldos y demás complementos, sino porque este modelo condena a los pueblos de sus provincias a la miseria y pobreza, a la esclavitud y postergación. Mientras todo se cobre y decida en Buenos Aires, y se gaste en el clientelismo político del Gran Buenos Aires y los negocios de la banda del diktador (en su provincia en especial) el destino es una nación de pobres y esclavos, desintegrada y sin destino.
Pero la gravedad de esta delegación de poderes no termina aquí sino que se da en un contexto donde se ha destapado ya en forma clara como el Diktador y su Jefe de Gabinete aprietan medios de comunicación para proscribir periodistas. Donde está claro que los dineros del estado se malgastan en promoción personal, lo que también es administración fraudulenta.
Porque usar el dinero del estado para promocionarse y mejorar la imagen del presidente no tiene nada que ver con el destino de publicitar las obras de gobierno, sino con un uso fraudulento de esas partidas que tiene por destino un beneficio personal de quienes lo administran. La difusión de los actos de gobierno es el ardid, la verdad alquilan voluntades, quiebran resistencias en medios de comunicación para que se conviertan en órganos de propaganda y difusión del gobierno.
La política de medios de comunicación de Kirchner es mucho más peligrosa que la de haber estatizado los medios de comunicación, es una estatización extorsiva pero de hecho. Y como ante la ciudadanía la propiedad de los medios es privada nadie puede acusar al gobierno de estar silenciando a la oposición y porque medios de comunicación alquilen sus micrófonos y pantallas, paginas y tapas a ensalzar el régimen K.
El manejo del dinero de la publicidad oficial, de licencias, los aprietes a empresarios privados para que no den publicidad a programas considerados “opositores” son parte de lo mucho que se hace contra la libertad, que los legisladores nacionales saben y callan, ayudando así a mantener la farsa de una sociedad libre y democrática. Y aun así le han dado al diktador un cheque en blanco de 98.000 millones de pesos.
Porque si bien el presupuesto nacional autoriza a recaudar y gastar solo $ 77.000 millones de pesos hay un permiso adicional de gastar el “superávit” del año 2004, que se estima en unos $ 20.000 millones, sino más. Y la cifra podría superar inclusive los 98.000 millones de pesos según muchos que estiman que la recaudación fiscal del año 2005 será superior a la de este año.
Y estos súper poderes en violación de la Constitución y sus obligaciones que han convertido al Congreso en un apéndice que sirve para legalizar los abusos de Kirchner se han dado a pesar que aún nadie rinde cuentas de cómo se invirtieron más de 1.000 millones de dólares de la provincia de Santa Cruz.
¿Cómo pueden dar semejante cheque en blanco a una persona que se niega a explicar el manejo de esa fortuna?
Porque es dinero ajeno, ajeno porque no es de ellos sino nuestro y de verdad demuestran que nosotros, el pueblo, no les importamos nada. Menos podría importarles nuestro dinero.
Y finalmente un párrafo a la emergencia que alegan para pedir, otorgar, estos abusivos e inconstitucionales poderes. ¿No estuvieron gobernando ellos mismos? Porque no se fue casi ninguno, están casi todos, por lo tanto algo que ver con la emergencia si la hay tienen que ver, ¿o no? ¿Hasta cuando la emergencia será de otros y por otros?
Hasta que despertemos y los echemos, y además sean juzgados como manda la Constitución. Entonces, solo entonces, los futuros gobernantes tendrán miedo de repetir estos abusos.