N ° 10/2004 - Año 5º
Buenos Aires, julio 15 de 2004.-
Selección de frases del hoy Secretario General de la Presidencia, Oscar Parrilli en su libro “Cuatro años en el Congreso de la Nación, 1989-1993.
“cuando Carlos Menem asumió la Presidencia de la Nación en 1989, las preguntas cambiaron, entre otras cosas porque tuvimos que hacernos cargo de la crisis más profunda de la historia del país. Por eso, debo señalar con sinceridad y profunda convicción, que no estamos arrepentidos de lo que fuimos, no sentimos vergüenza de lo que somos, y tampoco pedimos perdón por lo que estamos haciendo” (Pág. 7)
Las viejas políticas ya no alcanzaban para enfrentar los nuevos problemas que se nos planteaban. Hacía falta creatividad, decisión y voluntad para escapar de los viejos encasillamientos ideológicos para poder diseñar soluciones adecuadas, evitando los prejuicios del pasado. (Pág. 8)
Luego de largos años de tapar el problema y de intentar soluciones parciales, que llevaron al sistema de previsión social a la ruina total, era necesario tomar el problema de ra’zi y resolverlo sin medidas demagógicas……… un nuevo régimen de jubilaciones que en su esencia soluciona el problema de financiamiento y los beneficios de los futuros jubilados (Pág. 9) …….La nueva legislación evita que el aporte de todos los trabajadores financie deudas de gobiernos que mal administran los recursos públicos……….. se asumió la responsabilidad histórica de desactivar definitivamente esa bomba de tiempo (sistema de reparto)……….asegurándose así la intangibilidad de los fondos, cuya propiedad por parte de los aportantes se aseguro en la ley (Pág. 32 y 33)
Sobre las privatizaciones “Pésimas administraciones de gobiernos civiles y militares hicieron de estas empresas botines de guerra que, con el devenir de los años, se transformaron en deficitarias e ineficientes, prestando un servicio caro y malo…. quedó comprobado que servía solo a los intereses de las empresas contratistas del estado que se enriquecieron durante muchos años (Pág. 15)
Privatización de YPF………. “YPF fue paulatinamente tomada como coto de caza por distintas administraciones que incorporaron sin necesidad, importantes cantidades de de trabajadores cuyos sueldos también fueron a incrementar el sideral déficit que acumuló hasta 1989. (Pág. 24) En el primer aspecto se desreguló la actividad petrolera en la Argentina. Esta decisión permitió que el Estado dejara de ser el garante del negocio petrolero que encaraban las empresas privadas, y al mismo tiempo incentivó la competencia, la producción y la exportación de petróleo (Pág. 25)……. Hoy YPF es la gran empresa petrolera privada nacional que domina más de la mitad del mercado de los combustibles, produce una proporción similar de petróleo…. Paralelamente a la transformación de la empresa, la privatización de YPF tuvo un ineludible significado social: pagar la deuda que la sociedad en su conjunto contrajo con los jubilados” (Pág. 27)
N. de la R. Releyendo a Parrilli y viendo su gestión actual no cabe duda que tiene total conciencia de los desastres que están provocando su jefe y la banda montonera que lo acompaña. Por lo tanto muy pronto deberán responder con el total de su patrimonio al daño que están causando a todos los argentinos, lo cual será insuficiente pero ejemplificador.