N ° 13/2003
Buenos Aires, septiembre 11 de 2003.-
Las siguientes son declaraciones del Presidente Constitucional de la República Argentina, Juan Domingo Perón formuladas a “IL Giornale D’Italia” y reproducidas por la revista Panorama el 27 de septiembre de 1973 en nuestro país.
“Somos decididamente antimarxistas. Lo sucedido en Chile demuestra que Allende cayó víctima de su sectarismo, de su política tendiente al exceso. Estoy seguro que domaremos a la guerrilla, Chile ha enseñado muchas cosas. O los guerrilleros dejan de perturbar la vida del país, o los obligaremos a hacerlo con los medios de que disponemos, los cuales, créame, no son pocos. Las vicisitudes chilenas cerraron la única válvula de seguridad de que disponían los guerrilleros argentinos. A Cuba le advierto que no haga el juego que hiciera en Chile porque en la Argentina podría desencadenarse una acción bastante violenta. Si la guerrilla insiste, sucederá lo que en Santiago, donde la responsabilidad no fue de los militares, sino de los guerrilleros.”
Debe recordarse que a comienzos de 1974 el Presidente Juan D. Perón invitó oficialmente a visitar nuestro país al Presidente Augusto Pinochet, a quien condecoró en la misma sede del gobierno nacional. Lo que enseña que Perón tuvo claro el carácter de proceso libertador y antimarxista de la contrarrevolución de las Fuerzas Armadas chilenas contra la dictadura de la UP.
En otras palabras el Presidente argentino Juan Domingo Perón declara abiertamente que la guerrilla terrorista tanto en Chile como en nuestro país tenía un apoyo y promoción por parte de la Cuba de Fidel Castro.
Que Chile bajo el gobierno de Salvador Allende era una base de refugio, entrenamiento, y apoyo logístico de los terroristas socialistas en Argentina.
Que los causantes y responsables de la violencia, especialmente de la respuesta que daría el Estado y sus fuerzas armadas y de seguridad serían los mismos terroristas.
Que Kirchner y todos los dirigentes del peronismo no deberían olvidar que Fidel Castro y su régimen terrorista fueron enemigos de la democracia, y que los soldados cipayos que servían a esa agresión fueron los Montoneros o la Tendencia.
Que la senadora Cristina Fernández de Kirchner que hoy asiste a homenajes en Chile que el partido Socialista chileno le hace a Salvador Allende, debería estudiar un poco más la cuestión y dejar de homenajear al dictador Salvador Allende. Salvo que su admiración provenga por compartir el intento de imponer un gobierno totalitario siendo una minoría electoral, cuestión en la cual el gobierno de su esposo y Allende tienen alguna semejanza.
Los jueces, fiscales, senadores, diputados que se dicen justicialistas deberían poner en su contexto histórico cualquier investigación sobre la agresión terrorista del castro comunismo y su represión, porque asumir que las fuerzas de seguridad y policiales combatieron por órdenes del gobierno constitucional significará poner bajo la subordinación constitucional y legítima su accionar.
Que todo cuanto hoy se dice sobre “jóvenes idealistas para definir terroristas” o sobre la dictadura de Allende para intentar una injusta condena a los libertadores de Chile tiene por objetivo cambiar la historia, y olvidar la conducción de quien era su líder.