N ° 03/2002
Buenos Aires, mayo 13 de 2002.-
“Yo organizo la muerte, ahí estoy totalmente tranquila. Después vuelvo a mi locura diaria” Elisa Carrió, Crisis Argentina, página 52.
“El gobierno se llamo sucesivamente monarquía, aristocracia, democracia, pero ninguna de esas revoluciones dio a los hombres la verdadera libertad, que es la libertad individual.
Tener derechos políticos, votar, nombrar o elegir magistrados, poder ser uno de ellos, es todo lo que se llamaba libertad; pero el hombre no continuaba menos avasallado al Estado que antes lo estuvo........
No son las libertades de la patria las que han engrandecido a las naciones modernas, sino las libertades individuales con que el hombre ha creado y labrado su propia grandeza personal, factor elemental de la grandeza de las naciones realmente grandes y libres.........
Todo, o casi todo el rédito público es empleado en muchos países en el sostén de gentes no productoras” Juan Bautista Alberdi, La Omnipotencia del Estado es la negación de la libertad individual, 1880.