N ° 33/2000
Buenos Aires, octubre 02 de 2000.-
La tercera esposa del Vicepresidente Carlos Chacho Álvarez, Liliana Chernajovsky, estuvo presa en la ESMA durante el Proceso, junto a su entonces esposo, Nicoletti. Ambos eran “Montoneros” y Nicoletti termino cambiando de bando para ponerse al servicio de la Armada.
En esos tiempos Carlos Menem también estuvo preso, en un barco, en las Lomitas, etc.
Entretanto Domingo Cavallo ocupo varios cargos durante el Proceso. Junto al General Liendo se desempeñó en el Ministerio del Interior, como Director de Provincias, y luego en el Ministerio del Interior como Subsecretario de Asuntos Laborales, para pasar al Banco Central donde nos cargó a todos los argentinos la deuda comercial de algunas empresas privadas.
Luego fue Ministro de Carlos Menem donde impulsó la mayor parte de las políticas que entonces el Chacho combatía.
En 1994 el Senado de la Nación aprobó por unanimidad un proyecto de ley que según Cavallo era a medida de Alfredo Yabrán. El impulsor y defensor del dictamen de dicho proyecto fue el Senador Fernando de la Rua.
Cuando ese proyecto iba a ser tratado por la Cámara de Diputados, Domingo Cavallo invito a los entonces diputados Carlos Chacho Álvarez y Rosa Graciela Castagnuola de Fernández Meijide para usarlos como ariete contra el mismo.
Domingo Cavallo tiene 52 causas penales en su contra entre querellas y denuncias, muchas de ella de dirigentes del Frepaso mismo. Las que no avanzaron porque se amparo en los fueros parlamentarios. Sin embargo Cavallo reclama la renuncia de todos los Senadores Nacionales, aun de los no sospechados de haber sido sobornados. Y sube a la apuesta reclama la renuncia o remoción de los jueces federales, justamente los que deben investigarlo.
Todo esto parece ser distinto para el Chacho. Desde entonces descubrió que Fernando de la Rua era un político transparente, de la nueva política transversal seguramente. Como siempre siguió creyendo que Cavallo es bueno y Menem es malo entonces decide no asistir a una reunión en la presidencia a la cual va Menem y sí a la de Cavallo.
Frente a la historia de Menem, de la Rua y Cavallo durante el Proceso, cabe preguntarse cuales son los valores que alientan al Chacho Álvarez para decidir quienes están a su altura para juntarse, o no.
Pero aun queda más fue solo hace unos meses, cuando la noche del 7 de mayo, Domingo Cavallo trato de tramposos y fraudulentos a los dirigentes del Frepaso. Más aun sus palabras recordadas fueron referidas a los “partisanos” del Frepaso que le habían robado la elección.
Ni Chacho Álvarez, ni Domingo Cavallo parecen recordar aquella noche. Es que ahora están juntos intentando tomar el poder, entonces olvidan aquellas palabras, la historia.
Chacho Álvarez forzó el tratamiento de la ley laboral en abril, haciéndolo tratar aún sin existir dictamen de las comisiones de estudio. Le presto durante más de 20 días su despacho al Ministro Flamarique para ayudarlo en la negociación. Cuando el Senador Antonio Cafiero le refirió la probabilidad de sobornos para su aprobación el Chacho le contestó: “en esto no me meto por ahora”. Solo se metió cuando estalló el escándalo y temió verse envuelto. Tampoco cumple con sus obligaciones constitucionales pero cobra el sueldo.
Frente a este doble standard moral del Chacho, Francos y Cavallo es claro que la “nueva política” tiene mucho de inmoral. Es un simple oportunismo apoyado por el grupo Pravda-Tass destinado a tomar el poder, sin importar ni las ideas, ni el pasado, ni las conductas, solo los une la ambición y algún odio personal.