N ° 24/2000
Buenos Aires, julio 31 de 2000.-
Desde hace años el ex presidente Raúl Alfonsín se empeña en señalar al neoliberalismo, o al ‘modelo’ como el culpable de muchos males argentinos. Sin embargo resulta apropiado al menos recordar algunos logros del modelo de Alfonsín para comparar, sin perjuicio de rechazar que el sistema económico argentino sea liberal.
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Argentinos que querían emigrar del país en 1988 |
24% |
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Caída del poder adquisitivo del salario 12/1983 a 7/1989 |
26% |
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Inflación de los últimos doce meses (julio 1988/julio 1989) |
3.600% |
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Inversión directa de 12/1983 a 7/1989 |
(-17%) |
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Crecimientos del PBI 12/1983 a 7/1989 |
(-3,5%) |
Se puede agregar un dato de quien es el actual Ministro de Economía que en 1996 en su libro “Otra Argentina, otro siglo” al evaluar el desempleo señala que tomando en cuenta el desempleo disfrazado con contrataciones pagadas vía inflación en la época de Alfonsín era del 21%.
Con todo esto cabe preguntarse cuál es el modelo de la ética de la solidaridad, del neoradicalismo que Alfonsín pretende imponer. Alfonsín ya tuvo su oportunidad y fracasó. Sin vueltas el gobierno de Alfonsín fue un fracaso y el paroxismo de la corrupción, solo que esta se disimulaba por la inflación.
Lo curioso es la irrazonable actitud de alguna parte de nuestro pueblo que parece haberse dispuesto a tolerar la prédica de Alfonsín solo porque casi pierde la vida fruto de su irresponsable actitud de no usar un cinturón de seguridad.