Artículo

  Volver atrás

N ° 21/2000

Buenos Aires, julio 09 de 2000.-

SENSIBILIDAD Y AUSTERIDAD DELARUÍSTA

      “Es lindo pero lo vendo” Fernando de la Rua refiriéndose al avión presidencial durante su campaña electoral. Ahora no lo vende.

      “Dicen que soy aburrido” Fernando de la Rua refiriéndose a sí mismo durante su campaña electoral. Sin embargo parece que era un admirador oculto de El Potro Rodrigo porque en el día de su muerte se apresuro a enviar una nota de pésame a la madre y la familia. A quienes obviamente no conocía.

      Una carta manuscrita de pésame es un mensaje muy personal y para personas que uno conoce personalmente. Por eso es que la carta de Fernando de la Duda a la familia de Rodrigo fue un acto de burda propaganda y de hipocresía pretendiendo utilizar el dolor de sus admiradores en forma política.

      El Presidente de la Rua jamás en estos siete meses, ni como Jefe de Gobierno –léase intendente municipal- envió carta de pésame a la familia de ningún policía caído en acción. Ciertamente estas cartas que institucionalmente serian comprensibles y hasta podrían ser usadas políticamente deberían ser realizadas. Claro que Fernando de la Duda parece que en estos casos se pone a pensar y entonces no se decide a escribir.

La carta de pésame a la familia del Potro Rodrigo debe haber sido seguramente un acto de sincero dolor y por eso por un rato se levanto de su siesta para mandarla sin perder la esperanza de tener al menos flash en un acontecimiento popular.

      Siguiendo con el anecdotario de la “Tierra de Oficialistas” de canal 7, la exitosa y multimillonaria (y no por sus sueldos en el grupo Clarín precisamente) Nancy Pazos “logro” entrevistar a Antonio de la Rua quien necesitaba blanquear algunos ingresos y toda su sensibilidad.

      Así durante el reportaje nos enteramos que Aníbal Ibarra le había pagado U$ 15.000 por la campaña electoral del 7 de mayo. Lamentablemente con tan poca fortuna que olvidaron avisarle a Aníbal quien al ser requerido en Londres por ese pago dijo que jamás le había pagado un peso a Antonito.

      Posteriormente mostrando la genuina sensibilidad de un hijo del “prócer” Fernando de la Rua, se lamento por haber estado en Miami con Shakira justo cuando el gobierno de su papá estaba pasando un momento tan duro como el de anunciar él por ahora ultimo ajuste.

      En otras palabras para Antonito De la Rua la dureza del momento del ajuste fue para el gobierno no para los trabajadores a quienes se les confisco parte de su salario, ni para quienes una vez mas sufrimos anticipos de impuestos, etc. Fue la confirmación de la política vista por el gobierno, para el gobierno y del gobierno (puede cambiarse gobierno por estado o partido que para ellos da igual). Democracia y pueblo son dos palabras que se usan para discursos, la primera significa el derecho que tienen los segundos a elegirlos a ellos para que pasen momentos duros reduciendo el sueldo de los estúpidos que los votaron y de aquellos que siendo pueblo no lo hicieron.

      También Antonito De la Rua contó como su padre volvió a trabajar en 1989 cuando perdió su banca de senador nacional ya que “le gusta mucho su profesión jurídica”. Olvido claro que su papá saco en ese momento una jubilación de privilegio.

      En una demostración de austeridad los diputados de la Alianza festejaron los primeros siete meses gobierno con una fiestita en Buenos Aires News a la cual naturalmente asistió el austero Presidente Fernando De la Rua. Quien había dejado la cena anual de camaradería de las FFAA para ir a la fiestita que realizaron en el mismo lugar donde sus hijos y su banda habían festejado alcohólica y ruidosamente las elecciones de octubre.

      Un segundo ejemplo de austeridad fue el cóctel servido el viernes 7 de julio en Madrid por el ex senador nacional Alfonso Laferriere hoy embajador en España para conmemorar nuestra independencia. Solo 650 invitados. La embajada de los EEUU en Buenos Aires en esa misma semana para celebrar el 4 de julio invito a 500 personas, 150 menos que Laferriere.

 

  Volver atrás