N ° 11/2000
Buenos Aires, abril 24 de 2000.-
Las palabras de Elena Cruz dieron lugar a tres importantes tapas de Clarín. El viaje de Angel Moyano a los EEUU recibió una cobertura que hasta el precio del hotel nos dieron.
No menor debía ser la cobertura de la visita del Chacho Alvarez a Londres. Tapas, páginas relatando el “impresionante impacto” que causaba nuestro vicepresidente entre los dirigentes del gobierno inglés.
Ciertamente que Tony Blair y los legisladores deben haberse impresionado de su agudeza intelectual, de su fino sentido del humor, etc. como nos presentó el grupo Clarín la gira.
Lo difícil de comprender es como lo hicieron dado que el Chacho no habla inglés.
Lo difícil de ignorar es que el hotel de Hilton Court de Sloane Square de Londres es uno de los más caros de Inglaterra. Se halla situado en una corta callecita londinense donde están las tiendas más exclusivas, y caras, de Londres.
¿Está mal que Moyano acepte una invitación a New York y aproveche a recorrerla? No seguro que no, es más hasta capaz se da cuenta del error de las ideas que muchas veces defiende. Nada como viajar para abrir la mente.
Lo que está mal es que los muchachos que dirige Magnetto en el Grupo Clarín nos traten de tontitos. Ni Chacho es una estrella del firmamento que enceguece, ni deben ocultar los lujos que disfruta ahora. Si esos lujos eran malos para Menem, mucho más para quien hizo su carrera política reprochándolos como obscenos.
Mientras Chacho recorría Londres además cayo su amigo el ex dirigente comunista Massimo D’Alema, el líder del Olivo, aquella coalición izquierdista que Chacho y muchos otros idiotas vernáculos pretendían reproducir en nuestro país. Por cierto que no se les ocurrió recordar aquellas ansias de posar junto al comunista D’Alema, ni el silencio actual.
Tal vez en algo sea cierto el impacto de la visita del Chacho Álvarez a Londres, porque seguramente aprovechando su visita Tony Blair nos enseño que a pesar de la caída del socio italiano de la Tercera Vía ella goza de buena salud. Para demostrarlo anunció que pretende permitir que parejas de homosexuales puedan adoptar niños.
La Tercera Vía goza de buena salud, los gays están contentos. Los que están peligro son los niños huérfanos ingleses.
Mientras tanto habría que decirle a los directivos del Grupo Clarín que disimulen un poquito. En Inglaterra sino hablas inglés es muy difícil que te atiendan y mucho más que te admiren. Si, además, no hiciste nada muy importante, ni siquiera aceptar las sugerencias de su embajador acerca de cómo no tratar el tema Malvinas te puede ayudar.
Está bien que el Chacho sea uno de sus niños mimados, pero por favor no nos traten de imbéciles. ¡Ah! Y al Chacho mejor trátenlo como a los demás, eso es lo que se llamaría periodismo objetivo, profesional e independiente.
P.D. Claro que cuando se es socio del Estado en Papel Prensa S.A. lo de independiente suena a quimera.