N ° 10/2000
Buenos Aires, abril 17 de 2000.-
A su vuelta de New York Domingo Cavallo encontró que la UCEDE sería la culpable por la inclusión de Elena Cruz como candidata a legisladora porteña que él mismo hizo en su lista.
No quisiera entrar en detalles, pero conociendo los personajes, en la UCEDE no existe tanta materia gris, ni capacidad para urdir semejante maniobra, o complot como pretenden los cavallistas. No deben echarle culpas a otros de los errores propios, no es de liberal como pretenden ser, es de socialistas.
La Convención de Acción por la República (AR) le delegó en forma unánime a Domingo Cavallo para designar los candidatos a legisladores. Verdadero ejemplo de autoritarismo partidario que ni Alsogaray intentó en la UCEDE. El caso de AR se trata de un partido más verticalista que el PJ de Menem, y ciertamente muy poco liberal.
Cavallo eligió a los candidatos, seguramente en consulta con Sonia, y armó la lista. Pocos días antes de conocerse la opinión de Elena Cruz sobre la prisión domiciliaria de Videla, los Cavallo con su cholulismo habitual disfrutaban cenando con el matrimonio Siro.
No señor Cavallo, la señora Cruz no está en su lista por ninguna conspiración, sino por su propia decisión y elección. Si hay un culpable es él mismo Cavallo.
Cavallo siempre quiere encontrar un culpable en otro. A veces son Menem, Corach y Kohan, ahora Crespo Campos, Ibarra y hasta Alvaro Alsogaray y de los jueces del Superior Tribunal de la Ciudad. Jamás será su propio error de juicio. Jamás será que no puede llevarse el derecho constitucional por delante y que sus asesores se equivocaron.
Y por cierto los dichos de la señora Cruz son por lejos menos grave que haber sido Subsecretario de Trabajo del general Horacio Liendo, Director de Provincias del Ministro del Interior Horacio Liendo. Presidente del BCRA con Bignone, cuando estatizó la deuda privada de algunas grandes empresas y que debimos pagar todos.
No hacerse cargo de las culpas es una práctica de la mayoría de los políticos, y es algo en lo cual Cavallo resulta igual a esos de quienes se siente tan diferente.